Quién es Shiatsufem

Mi andadura en la Medicina Tradicional China comienza de una manera muy discreta y superficial con un curso, no tan liviano como yo creía, de acupuntura estética. 

 

Al resultarme sencillo eso de pinchar y mi afán por aprender más y más, mi curiosidad me lleva a un sin parar de nuevas formaciones: auriculoterapia, diagnóstico emocional oriental,  acupuntura zonal,  hinaishin, lifting japonés, masaje tailandés y al fin SHIATSU.

 

La magia del Shiatsu estaba en cómo tratando otras zonas distintas a las afectadas podías producir cambios instantáneos en el cuerpo y cómo un dolor físico podía desvelar y tratar, a la vez, un desequilibrio emocional (como Licenciada en Psicología me parecía trabajar el cuerpo a otro nivel).

 

A día de hoy me sigue impresionado su efecto.

 

Mi primera experiencia, aplicando solo una secuencia básica de Shiatsu en silla y algún punto de acupuntura que busqué en Internet, superó con creces mis expectativas. Mi primer paciente (que no cliente) creyó en mí más que yo misma. 

 

Gracias Mario por confiar y darme esta oportunidad.

 

A este proyecto le faltó un socio que tuvo que marcharse antes de tiempo, pero que me ha dado la confianza y me ha hecho creer que mi propósito puede ser mucho más grande de lo que pensaba.

 

No puedo dejar de mencionar a mis dos referentes en este campo, Thais Otegui, con su técnica impecable y Arturo Valenzuela, de conocimientos infinitos. Gracias siempre. 

 

He continuado con otros muchos aprendizajes, como normalización de fascias,  técnica sacro-craneal,  quiromasaje... y seguiré sin duda por este camino.

 

Si tienes molestias musculares,  estrés,  insomnio,  dolencia emocional o simplemente quieres disfrutar de un ratito de autocuidado y relajación, estoy para lo que necesites. 

 

¡Nos vemos!